Seguimos nuestro repaso de las variedades de animales domésticos de Asturies y su relación con otras variedades europeas. Llega ahora el turno de la Cabra Bermeya y la Pita Pinta.
Cabra Bermeya
La Cabra Bermeya es otra de las razas de ganado doméstico presentes en Asturies. Por las excavaciones del Castro de la Campa Torres sabemos que también estaba presente en la cabaña ganadera de los astures. Sin embargo, el área de distribución histórico geográfica del género Capra no incluye ninguno de los actuales países celtas. La razón es que las cabras son animales adaptados a comer arbustos y matas correosas propias de medios secos o montañosos, ambientes inexistentes en las islas británicas o la Bretaña francesa.
![]() |
Distribución geográfica del género Capra |
Por otro lado, el propio comportamiento de las cabras, habituadas a trepar por pendientes muy pronunciadas y a saltar de un risco a otro, hace que su grado de domesticación sea menor que el las ovejas o las vacas, tratándose en muchos casos de animales que viven en semilibertad y se cruzan con frecuencia con ejemplares salvajes.
Actualmente se acepta la existencia de 9 especies de cabras: Cabra Pirenaica, Cabra Alpina o Íbex, Cabra Nubia, Cabra Sibirica, Cabra Walie, Cabra Caucásica de este, Cabra Caucásica del Oeste, Cabra Falconeri y Cabra Aegagrus. Se piensa que de esta última procede la cabra doméstica, de la que existen numerosas razas como la Alpina, la Saanen, la Angora, la Cachemira, la Cabra Enana, la Anglo-nubiana y la Bóer, entre otras. Entre las razas de la Península Ibérica podemos citar la Murciano-Granadina, la Malageña y la Florida como razas lecheras. En peligro de extinción encontramos la Serrana Andaluza, la Blanca Celtibérica y la Cabra Bermeya asturiana.
![]() |
Distribución geográfica de las diferentes razas de cabra en la Península. |
La práctica de la trashumancia hace que apenas exista aislamiento reproductivo entre las distintas variedades caprinas presentes en la Península. Así, la Cabra Bermeya está emparentada con las razas Charnequeira y Bravía, de Portugal, con la Retinta de Extremadura y con la Guisandesa de Ávila.
![]() |
Un rebaño de cabras bermeyas |
Las variedades Irish Goat y Bilberry Goat presentes en Irlanda son fruto de la introducción de cabras procedentes de Francia hace unos 300 años. Así pues, no existe ninguna raza emparentada con la Cabra Bermeya en los llamados países celtas. Esto podría deberse, como hemos dicho, a que el ambiente de las Islas Británicas no es el más apropiado para estos animales, o bien a que la cabra bermeya no figuraba entre los animales domésticos que los astures llevaron consigo en su viaje hacia las islas.
Pita Pinta
La Pita Pinta fue descrita por el biólogo y veterinario Rafael Eguiño Marcos, quien debido a su trabajo, recorrió gran parte del territorio asturiano observando en lugares de dificl acceso ejemplares de gallinas cuyas características fenotípicas no se correspondían con las variedades comerciales habituales. Estas gallinas eran conocidas por los ganaderos como Les pites d'enantes, cuya traducción al castellano vendría a ser Las gallinas de antaño.
![]() |
Gallu de Pita Pinta |
Rafael Eguiño encontró tres grupos bien definidos dentro de la Pita Pinta, que denominó variedades blanca, pinta y roxa. La coloración de la variedad pinta, que da nombre al grupo, tiene especial importancia para nuestro propósito, pues se trata de una coloración infrecuente y probablemente ligada a un fenotipo ancestral. Es una gallina rústica y con marcado caracter maternal, hechos que la relacionan con las variedades avícolas del Arco Atlántico.
Fernando Orozco, ilustre genetista y toda una autoridad en lo que se refiere a la clasificación morfológica de la razas de ganado de la Penísnula Ibérica, también incluyó a la Pinta Pinta en el Tronco Atlántico, relacionándola con la variedad Marragun de la gallina vasca (Euskal Oiloa) con gallinas centro y nord-europeas, así como con las británicas. En la Península Ibérica se diferencia entre gallinas de tronco atlántico, haciendo referencia a animales de mayor tamaño y de tronco mediterráneo, con ejemplares más ligeros. Estas diferencias entre poblaciones se han observado al estimar distancias genéticas con marcadores microsatélites.
En Escocia encontramos la variedad Scots Dumpy, llamada Coileachchime o Coileach degh sheinneadair, literalmente gallina ruidosa o gallina que canta en gaélico escocés. La Scots Dumpy fue estandarizada en el siglo XIX, pero está considerada una raza ancestral. Una de sus características es poseer patas muy cortas, hecho que atestigua su presencia en las Islas Británicas al menos ya en el siglo XI, como demuestran estudios arqueológicos. Así mismo existe una leyenda que relaciona esta raza con los celtas y los pictos, antiguos pobladores de Escocia, a quienes se dice avisaban con su canto de la presencia de extraños.
![]() |
Gallo de Scots Dumpy |
Como se oberva en la imagen, la Scots Dumpy presenta un plumaje blanco con manchas oscuras que se correspondería con un fenotipo ancestral, al igual que ocurre con la Pita Pinta.
Una de las razas de gallina más antiguas de las Islas Británicas es la Gallina Dorking. El emperador romano Julio César dio testigo de la existencia de esta variedad con anterioridad a su invasión de Britania en el 55 A.C. Así mismo, el escritor agronómico romano Lucius Junius Moderatus, nacido en Gadir (Cádiz) y conocido como Columela, describió con todo detalle esta variedad avícola que tuvo oportunidad de observar durante su estancia en Britania con el ejército de Julio César.
Gallo de raza Dorking |
Pero no debemos conformarnos con el principio de autoridad de investigadores como Fernando Orozco a la hora de relacionar a la Pita Pinta con las variedades avícolas atlánticas y británicas. Para el tema que nos ocupa debemos plantearnos qué tipo de relación genética existe entre las variedades Scots Dumpy y Dorking con la Pita Pinta asturiana. Sin embargo, en el momento de escribir este artículo no he podido acceder a ningun estudio genético que determine el grado de parentesco entre las variedades citadas, por lo que la relación ente las mismas basada en caracteres morfológicos solo podría considerarse como mero indicio de una relación histórica entre los astures y los pobladores celtas de las Islas Británicas, siendo necesario un estudio genético que lo corrobore.
En la última de las entradas dedicadas a este tema intentaremos dar a una respuesta a la cuestión de si los astures eran celtas basándonos en los argumentos expuestos en estos cuatro capítulos y planteando una hipótesis arriesgada y sorprendente.
¿Eran celtas los Astures? (y V)
Entradas anteriores:
¿Eran celtas los Astures? (I)
¿Eran celtas los Astures? (II)
¿Eran celtas los Astures? (III)
No hay comentarios:
Publicar un comentario